Esta semana llega la primera ola de frío del año con un desplome de las temperaturas bajen en buena parte del país. Se esperan lluvias y nevadas, especialmente en el tercio norte de la Península Ibérica.
Durante estos días, deberemos tener especial cuidado a la hora de ponernos al volante en zonas donde la lluvia, el granizo o la nieve nos pueden poner en situación de peligro. Circulamos con menos horas de luz y por carreteras con menos adherencia, por lo que es importante extremar las precauciones y tomar una serie de medidas tanto antes como durante el trayecto.
A continuación, te damos una serie de consejos para evitar imprevistos y desplazarnos con la mayor seguridad posible:
– Revisa la documentación: Asegúrate de que llevas contigo estos documentos, originales o compulsados, ya que tendrás que mostrarlos si algún agente site para o te ves involucrado en un incidente: permiso de Conducir del conductor, permiso de Circulación del vehículo, tarjeta de Inspección Técnica (ITV). Recuerda que desde 2008 no es obligatorio llevar en el coche la póliza del seguro ni el recibo del último pago.
– Extrema todas las precauciones: En condiciones adversas, la adherencia de los neumáticos del vehículo con la carretera es menor y cualquier brusco puede suponer la pérdida de control de nuestro automóvil. Se recomienda realizar una conducción “suave” y progresiva, sin movimientos o cambios bruscos y aminorar la velocidad.
– Usa marchas largas y a bajas revoluciones: Conduciendo en marchas bajas o cortas, la fuerza que se transmite (el par) a las ruedas es mayor y por lo tanto, también es mayor la posibilidad de que las ruedas pierdan adherencia y acaben patinando. Es decir, debemos disminuir la fuerza aplicada a las ruedas. Si en condiciones normales conducimos de una determinada manera, en condiciones desfavorables, debemos cambiar antes a marchas más altas.
– Cuidado con el acelerador: Tenemos que ser prudentes a la hora de pisar el acelerador y mantener con él dos premisas: disminuir la velocidad, acelerar de forma moderada y progresiva y hacer que el motor funcione a revoluciones medias o bajas y nunca altas.
– Atención a los frenos: Pisar más el freno no implica un control mayor del vehículo. De hecho, en todo caso debemos evitar que se bloqueen las ruedas al pisar el freno. Para ello, debemos anticipar la frenada, y alternar el uso del pedal del freno con el freno motor. La frenada deberá ser progresiva.
– Revisa el coche de antemano y ponlo a punto en un taller: Comprueba los niveles de los distintos líquidos (refrigerante, aceite, etc), estado de los frenos, neumáticos.
– Utiliza ruedas para el invierno: Los neumáticos de invierno se agarran a la nieve de una forma mayor que los neumáticos de verano gracias a su banda de rodadura y su dibujo. Este tipo de ruedas está identificada en el flanco (en el perfil) con las letras M+S (mud and snow que significa barro y nieve).
– Usa juegos de cadenas o fundas para la nieve: Además de llevarlas en el vehículo, es necesario saber de antemano cómo se deben colocar. Para ello, es recomendamos instalarlas de forma previa.
– Lleva contigo estos elementos, podrán sacarte de un apuro: Teléfono móvil con la batería cargada al máximo; alimentos (barras energéticas u otra comida) agua y/o refrescos en el vehículo; linterna; mantas y ropa de abrigo; y gafas de sol.
– Revisa los elementos de seguridad adicionales: rueda de repuesto, chalecos, triángulos. No olvides comprobar que funcione correctamente la calefacción del vehículo y la luneta térmica trasera.
– En caso de sufrir o presenciar un accidente, aplica la técnica llamada PAS, que consiste en Proteger la zona, Avisar a los servicios de emergencia y Socorrer a los Heridos y personas implicadas.
Información ofrecida por Real Automóvil Club Vasco Navarro (RACVN).
