Como posiblemente ya conoceréis, la Ley 7/2023 de protección de los derechos y el bienestar de los animales, que entró en vigor el pasado 29 de septiembre, contempla la obligatoriedad de asegurar la posesión de perros (no únicamente los potencialmente peligrosos) al indicar que, durante toda la vida del animal, su propietario debe contratar y mantener en vigor un seguro de responsabilidad civil por daños a terceros por un importe de cuantía suficiente para sufragar los posibles gastos derivados que se establecerá reglamentariamente.
En la actualidad todavía no se ha concretado la efectividad y la cuantía por la cual deberá contratarse, siendo recomendable, en cualquier caso, importes no inferiores a 150.000 € dando cobertura a cualquier persona que esté a cargo del animal, incluyendo a los cuidadores. El incumplimiento de esta obligación pueden conllevar sanciones de 500 € a 10.000 €.
Como nos informan desde Confide, debemos tener en cuenta que el tratamiento que da el mercado asegurador no es homogéneo ya que los seguros de carácter obligatorio, como este, están excluidos en el condicionado general, no cubriéndose, tampoco, posibles usos profesionales.
Por ese motivo es recomendable su contratación a través de una póliza específica que podrá incluir, también y entre otras, coberturas de asistencia veterinaria, extravío, fallecimiento, accidente y gastos de defensa legal.
Información ofrecida por Confide.
